lunes, diciembre 27, 2010

si no amas, eres inútil...


Con una sensación de profunda gratitud, me he enterado de la muerte de un religioso marianista. Lo conocí en Córdoba, Argentina. Un hombre mayor, con la mirada algo cansada ya, por el pasar de los años supongo y una vida entera enseñando, al servicio de los demás. Aún conservaba ese humor característico del carisma marianista, muy entusiasta, se notaba pasión en sus palabras... amor.
Fue sólo un encuentro, uno, muy casual por lo demás.

Días calurosos de febrero al otro lado de la cordillera, en un encuentro de jóvenes, después del almuerzo había que lavar loza, le tocaba a mi grupo... cuando ya el trabajo estaba hecho, quedábamos Mauri y yo... y Pancho... sentado en la mesa de la cocina, descansando un rato. No recuerdo el porqué pero, nos sentamos con él a conversar, nos contaba de su vida, de que la mayoría de sus años las pasó en salas de clases, le contamos que queríamos ser profesores y que nos recomendaba él, con toda una vida de experiencia... nos dijo: "si no amas a los alumnos, no tienes nada que hacer en la sala de clases, es así de simple, si no amas eres inútil, no hay más"... Nunca olvidaré esas palabras, vacías de teoría y cuanta cosa complicada, pero llenas de verdad y vivencia...

La conversación siguió hasta un buen rato, hasta cantamos unas canciones... Esa noche debía partir, sólo se quedó un par de días, y agradeceré siempre esa oportunidad de haber compartido, aunque fuera una vez con una persona como Pancho.
Si sólo hablamos una vez, imagino el cariño de los que tuvieron el privilegio de ser sus alumnos, alumnos amados por su profesor...

Gracias, muchas gracias Pancho por tu existencia y el breve pero impoortante paso por mi vida, buen viaje :D

miércoles, octubre 27, 2010

libertad?

aveces me pregunto para que toda esta mierda, para aprender que, (los "grandes" dicen que todo sirve para aprender) no habrán acaso otras formas de aprender menos crueles???
bah! y que tanto, si al final igual me la paso en vela, pensando en polillas y en cuanto bicho escuche, la noche, la noche se hizo para dormir o para pensar. Ajena a todo, a cualquier cosa que antes pertenecía ahora soy ajena a todo...¿ para que? para que esa pertenencia a las cosas, tan necesaria pero inútil, ¿y la libertad dónde? libertad de estar aquí o allá, poder partir sin dolor, poder dejar partir sin dolor...
pienso en la miel, en lo que extraño aquellos veranos con sabor a miel...
y esta no pertenencia me mata en ocasiones... ¿será el precio de la libertad?

miércoles, octubre 20, 2010

del porque elijo ser profe

Desde el colegio sentí pasión por la ciencia, en particular la física, y entré hace dos años a licenciatura en física. Al principio todo bien, muy entusiasmada, me encantaba aprender, pero al pasar el tiempo me pregunte si quería hacer ciencia toda mi vida y comencé a sentir un vacío en lo que hacía... le faltaba un propósito a todo lo que estaba aprendiendo. Ese propósito lo encontré, descubrí que así como siento pasión por la ciencia, también siento una enorme pasión por enseñar y transmitir lo que más me gusta, que no es sólo física, también lo es el aprender cosas nuevas siempre, reavivar la curiosidad que perdimos con el tiempo. Creo que el desafío es transmitir amor por aprender, más allá de la disciplina que se escoja. Saludos a todos quienes creen en que la educación puede cambiar a nuestro país. ánimo a todos!!!

publicado en elijeeducar.cl =)

domingo, octubre 17, 2010

La llegada del Hombre a la Tierra

Dado que por las circunstancias personales vividas la semana pasada, no tuve mucho tiempo de vivir muy a fondo el milagro de los 33... fuera de todo comentario absurdo y amarillista dejo a alguien que sin duda alguna se expresa mucho mejor que yo... una inexpresadora. Saludos


Cristián Warnken

Jueves 14 de Octubre de 2010
La llegada del hombre a la tierra


Cristián Warnken

Espero el rescate de los mineros en el silencio de mi biblioteca, releyendo a Saint-Exupéry, piloto y escritor francés, autor de libros tan fulgurantes como "El Principito" y "Tierra de hombres". Busco algo que esté a la altura de este momento de alta concentración de pureza.

Asistimos a una muestra más de la proeza y el milagro del hombre sobre la tierra, esa que celebró y vivió Saint-Exupéry, como pionero de tantas travesías aéreas. La salida desde las entrañas de la mina de esos hombres vestidos como astronautas me recuerda ese día de mi infancia en que el hombre llegó a la Luna. ¿Cómo nombrar lo que estoy viendo? Sólo se me ocurre bautizar este momento como la segunda llegada del hombre a la tierra. A las 00:10 horas, de ayer miércoles, Florencio Ávalos salió desde el fondo de una mina, volvió a pisar tierra firme, a respirar el aire y paladear la luz, a ver -y no sólo mirar- el rostro de los suyos, como un primer hombre que regresara desde otro planeta. Un Adán nortino al que se le dio la oportunidad de regresar al paraíso: y el paraíso no es sino nuestro propio jardín visto por primera vez.

Los grandes acontecimientos como este hay que vivirlos en recogimiento, hacia el interior, y no arruinarlos con farandulerías o cálculos mezquinos. Los verdaderos hombres de acción saben esto, y por eso son parcos y sobrios en palabras, y con su silencio dan testimonio de su épica. Es raro ver a un pionero, a un descubridor o a un héroe cómodo en las celebraciones o frente a los discursos que otros hacen sobre sus hazañas. Por eso Saint-Exupéry escapaba apenas podía de la ciudad con su vida social, luchas de poder y "habladurías" vacías que tanto detestaba, para internarse en el silencio de la noche y sobrevolar en su avión la "tierra de los hombres". En esa noche, lo emocionaba vislumbrar las luces desparramadas en las colinas o valles, como lámparas solitarias del hombre, como estrellas en la geografía. Y se imaginaba qué realidad humana escondía cada una de esas luces vistas desde el aire. Abajo -decía-, los hombres "creen que su lámpara brilla sólo para su humilde mesa, pero a 80 kilómetros de ellos, uno ha sido ya tocado por el llamado de esa luz". Saint-Exupéry se perdió un día en el cielo, se eclipsó sin ceremonia de adiós, como el Principito lo hizo frente a él en el desierto. Eligió la soledad del hombre consigo mismo para su despedida, él, que cantó los lazos entre los hombres, la fuerza de la camaradería, la única capaz de sostener las grandes hazañas.

En el patio central de la Alianza Francesa, Liceo de Saint-Exupéry, pasé muchas veces junto a una piedra colocada allí en su memoria, como un estudiante distraído, sin calibrar lo que en ella leía, concentrado en las tormentas propias de mi adolescencia. Ahora, en esta hora de rescates, releo lo que escribió en un día tan asombroso como este el piloto enamorado de la noche humana: "Ser hombre es precisamente ser responsable. Es sentirse orgulloso de la victoria que han traído los camaradas. Es sentir, colocando su piedra, que uno ayuda a construir el mundo".

Creo escuchar el motor de un avión en el cielo: quiero creer que es Saint-Exupéry que otra vez nos visita desde arriba, y que al cruzar la cordillera es sorprendido por un oasis de luces en mitad de la noche del desierto. Esas luces son de mineros chilenos que nos demuestran una vez más que la camaradería, aun en el infierno, puede salvar al hombre. Y está la luz propia de los ingenieros y los rescatistas, héroes de la precisión y de la técnica, en su expresión más noble. Ellos seguramente se sienten incómodos bajo tantos focos y micrófonos y cámaras. Porque para entender esta noche hay que iluminarla con el silencio de todos. Y tú lo sabes, Saint-Exupéry, piloto de los pocos pero gloriosos momentos en que el hombre -polvo de estrellas- se alza y vuelve a brillar en el cielo como la luz fugaz y milagrosa que nunca debió dejar de ser.

miércoles, octubre 13, 2010

jorge drexler sanar

para cuando vuelvas mamá...

martes, octubre 12, 2010

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Hasta dónde podemos...
hasta donde debemos...
hasta donde somos capaces...
¿cómo? pero cómo!!!! mierda!!!
¿¿¿cómo????

viernes, septiembre 10, 2010

más botado que blog de la Pame...

Hoy es un buen día para escribir... pues ha sido uno de esos malitos... en que las cosas no funcionan según lo planeado...

Salí muy bajoneada desde la SIE (salón internacional de educación), pues me hice muchas espectativas acerca del evento... grande fue mi sorpresa cuando no encontré a innovadores profesores exponiendo sus experiencias en el salón de clases sino más bien un puñado de vendedores que poco sabían de lo que realmente es un salón de clases...
mucha tecnología para la elite pero el desafío no es la educación pública?... al parecer no, no es prioridad... nada de igualdad... para educar hay que tener dinero... con eso me quedo... pues señores les informo que no, para educar hay que tener vocación!!! lo innovador está en la cabeza de cada docente, no en una pizarra super robotica ni en softwares super sofisticados, y demás está decirlo en experimentos super caros... dónde está la innovación...

Como profesores o futuros profesores debemos ser capaces de hacer clases de calidad sin necesidad de una infinidad de recursos monetarios... cuantos trabajos del colegio no hice con desechos???.

Mi indignación es por el hecho de que una actividad patrocinada por el ministerio de educación promueva y de a conocer una manera de educar que es sólo para la elite que puede pagarla...

Que mierda!!! acaso debemos darle a los alumnos el conocimoento en bandeja??? pues pienso que no, somos seres humanos inteligentes capaces de pensar y descubrir por nosotros mismos, y permitame decirle que la innovación en educación no apunta hacia allá...apunta a un negocio... un vil negocio, de empresas que poco saben de educación...

Recomiendo la lectura de una columna de Cristián Warnken acerca de la educación o más bien de las autoridades en el ministerio...

http://blogs.elmercurio.com/columnasycartas/2010/08/19/la-mas-alta-de-las-poesias.asp

...El adorno a todas las cosas es tan abundante como las moscas...